Escrito por: Luis Alfredo Villalba Ruiz
No es importante si es fofo, a pesar de las voces de regodeo, de las de resignación y las de sana preocupación, estas ahora en medio del tumulto que te quiere para sí.
No es importante si es fofo, unos llegan a tocarte y les bastará, otros verán en ti la oportunidad esperada, otros mejor preparados sacan ventaja de tu estampa.
No es importante si es fofo, los más a pesar de tu presencia, no fugas, sienten una distancia inalcanzable a pesar de su anhelante y empeñada voluntad.
No es importante si es fofo, lo que importa es una palabra capaz de salvar la más abismal distancia y capaz de sin infundios y con generosidad tenderte la mano amable del reconocimiento a lo hecho.
No es importante si es fofo, si a pesar de serlo, intentas remediarlo para trascender el tiempo del hoy, al reflexionar que cada generación crece una sola vez y es adeudo de la presente ponerla sobre tierra a la siguiente.
Un beso de saludo al llegar y esperanzar ya no es el calor tierno de quien llega con las manos llenas, es la grieta antigua que aflora y se hace omnipresente para dejar recordar las desconfianzas sembradas.
Un beso de despedida será lo menos esperado y motivo seguro de una grieta que profundizará y será insalvable en la memoria frágil del desesperanzado.
No es importante si es fofo, si a una sola voz y con una sola voluntad se determina sustentar lo fofo para darle firmeza y solidez para trascender en el tiempo y dejar de pie al testigo efectivo de una decisión comprensiva, justiciera y desprendida en pleno siglo XXI.